Tercera parte: EL DIOS YAMA BUSCA A SATIAVÁN

Un año después, Savitrí y Satiaván se encontraban en el bosque cuando de repente apareció Yama, el dios de la muerte, vestido de rojo. Yama era aterrador. Sin previo aviso, Yama ató a Satiaván con una soga y comenzó a arrastrarlo.

Savitrí, desesperada, gritó: "¡No te lleves a mi esposo!". Pero Yama ignoró sus súplicas y continuó arrastrando a Satiaván. Sin temor alguno, Savitrí decidió seguirlos sin descanso.

Yama, el dios de la muerte, le dijo a Savitrí: "Todos me temen. Regresa a tu hogar". Pero Savitrí respondió valientemente: "Los dioses ordenan que la esposa siga al esposo. Te seguiré a donde sea. No tengo miedo de ti".

El dios Yama miró fijamente a los ojos de Savitrí y dijo: "Es verdad. No me temes. Acepto ser tu amigo y concederte lo que pidas. Sin embargo, no puedes pedir la vida de tu esposo".

Entonces Savitrí hizo cuatro peticiones:

1. Habló del amor y pidió que el padre anciano de Satiaván recobrara la vista. Yama accedió a su petición.
2. Habló de la amistad y solicitó que el padre de Satiaván volviera a ser rey. Yama también concedió esta petición.
3. Habló de la bondad y pidió que sus propios padres tuvieran muchos hijos más. Yama cumplió su deseo.
4. Habló de la justicia y deseó tener muchos hijos con Satiaván. Nuevamente, el dios Yama aceptó su petición.

Sin embargo, Savitrí agregó con tristeza: "No puedo tener hijos con Satiaván porque él está muerto". Fue entonces cuando el dios Yama devolvió la vida a Satiaván.

Al regresar a su hogar, Savitrí y Satiaván se sorprendieron gratamente. El padre anciano de Satiaván recuperó la vista y mensajeros llegaron para anunciar que los enemigos del reino de Satiaván habían sido expulsados. El padre de Satiaván volvía a ser el rey, y Yama había cumplido todas sus promesas.

Savitrí y Satiaván se mudaron al palacio del reino de Yalua y, poco después, dieron la bienvenida a su primer hijo. Con el paso de los años, el padre de Satiaván falleció, y Satiaván asumió el trono como nuevo rey, mientras que Savitrí se convirtió en la reina.